Plantae son piezas que combinan los elementos naturales encontrados, como en Críptidos, pero en este caso sin más intervención sobre ellos. Esta serie entronca con una disciplina artística japonesa llamada Ikebana: antiguo arte que emerge de un respeto hacia la naturaleza, como otras manifestaciones artísticas japonesas, tales como la caligrafía, ceremonia del té, la poesía haiku… El Ikebana es una forma de vivir en comunión con la naturaleza, usando los medios de autoexpresión de ésta para desarrollar nuestra habilidad de ver nuevas formas, acentuando la singular belleza de cada elemento y trabajar la esencia del modelo, permitiendo a la composición expresar mucho con muy poco y expresar con belleza la naturaleza cambiante de las cosas. Así pues, tomando la idea de este arte, Plantae reflexiona sobre el tiempo, lo efímero, la presencia y el equilibrio entre nosotros mismos y la naturaleza.